A las 8 hs del sábado 19 zarpo a Les Saintes……
Cargue gasoil, café con leche y ….a navegar………8,30 hs, timón Raimarine, motor 1800 vueltas, 4 nudos de velocidad, rumbo 333, el mar está planchado, no hay viento, más adelante se ve el agua rizada por una leve brisa del norte.
Les Saintes se ven perfectamente, son 20 millas no más.
Llegue a mediodía, con mucho cuidado porque tiene varias entradas entre islotes, yo entré por el sur, despacito viendo el camino en el GPS, pero como tengo solo cargados los WP, la línea pasa por arriba de la tierra, así que a mirar la realidad….todo bien, lento.. pero seguro….
Entre a la villa Iles Les Santes y en seguida vi el Samsara, un Regge 35 de Eduardo Klenk, conocido trotamundos Argentino…tiré el fondeo cerca…me puse a armar el bote y…zas..!!!se desarmo la válvula de babor, imposible, se fue una piecita para adentro, y para afuera salto un resorte y una tapita que se quedo en mi mano, en esto estaba cuando se acerca un señor con sombrero de vaquero de películas y me pregunta si tengo problemas….le contesto en ingles que si, que mi bote se rompió, se subió al barco, miro y me dijo que había que rescatar la piecita de adentro del bote…yo lo mire y pensé …esta loco….como voy a hacer? con un bote tan grande y la piecita tan pequeña ? Bueno se ofreció para llevarme a la costa en su botecito…camine por la única calle que tiene la villa..hasta que veo un señor leyendo sentado al lado de montones de pinturas colgadas de cabitos….me pare enfrente y le pregunte en el más puro Argentino…..usted se llama Klenk ?? me miro sin entender….y me apresuré a presentarme…bueno…conocí un verdadero personaje…..fotógrafo, explorador andinista y navegante solitario, muy linda persona…un poco rezongón según él..me ofreció su bote hasta que arregle el mío, pero no fue necesario….al otro día, domingo, vino el vaquero bien temprano, después me entere que es Australiano, de Sidney…sube y me empieza a dar ordenes….colgamos el bote de dos lados, de proa y de estribor, quedo colgando para abajo justo donde esta el agujero de la válvula, empezó a buscarla hasta que la encontró y la fue llevando hasta el orificio, la sacó y con las piezas que yo tenia, armo de nuevo la válvula y se paso una hora dándole al inflador hasta dejar el bote impecable….no lo podía creer…un genio…se despidió y quedé súper agradecida….después vino con la señora a la noche a ver si estaba bien, todo en orden y así lo repitió todos los días…..vino a ver si estaba bien…..creo que el estar sola …mueve a los navegantes masculinos a ser protectores….
Recorrí todo el pueblo caminando y es lo más lindo que conocí del Caribe …es un lugar soñado…un paraíso…
La idea es partir mañana al sur de Guadalupe, a una marina, pero parece que va a refrescar y se pone feo con mas de 20 nudos…
Aurora Canessa